Según Cointelegraph, World, el proyecto de identificación digital liderado por el CEO de OpenAI Sam Altman, ha recaudado con éxito $135 millones de firmas de capital de riesgo Andreessen Horowitz y Bain Capital Crypto. La financiación tiene como objetivo mejorar la red de orbes de escaneo de iris e infraestructura dentro de los Estados Unidos y expandir su alcance global. La compañía anunció en abril su intención de operar en seis ciudades de EE. UU., con planes de aumentar la cobertura a nivel mundial.

World ha emitido más de 12.5 millones de IDs mundiales en más de 160 jurisdicciones, estableciendo "prueba de personalidad" a través de la recopilación de datos biométricos. Sin embargo, el proyecto enfrenta desafíos regulatorios significativos y prohibiciones en varios países. Los críticos argumentan que ofrecer incentivos financieros para la recopilación de datos biométricos compromete el consentimiento informado, planteando preocupaciones éticas sobre los sistemas de identificación digital centralizados y la privacidad de los datos.

En enero, la Autoridad Nacional de Protección de Datos de Brasil (ANPD) ordenó a World cesar operaciones en el país, citando preocupaciones sobre la incentivación de la recopilación de datos biométricos a través de pagos en criptomonedas. La ANPD ratificó la prohibición en marzo, enfatizando el modelo de negocio de la compañía de intercambiar pagos en criptomonedas por datos biométricos. World arriesga multas diarias de 50,000 reales brasileños ($8,851) si continúa operando en Brasil.

De manera similar, el Ministerio de Comunicaciones y Digital de Indonesia (Komdigi) suspendió la licencia comercial de World el 4 de mayo, acusando a algunas subsidiarias de no registrarse como proveedores de servicios de activos digitales bajo el marco de Registro de Certificados de Operadores de Sistemas Electrónicos (TDPSE). Komdigi ha iniciado una investigación y planea reunirse con representantes de subsidiarias para abordar el problema.

Estas prohibiciones siguen a una directiva de diciembre de 2024 de la Oficina Estatal de Protección de Datos de Baviera (BayLDA), un regulador alemán, que exigió a World cumplir con los estándares de protección de datos de la Unión Europea. La directiva requiere que World ofrezca a las personas la opción de eliminar fácilmente sus datos biométricos de la red, destacando la continua supervisión del proyecto.